viernes, enero 25, 2008

Tu Palabra

Palabra. (Del lat. parabŏla).

5. f. Empeño que hace alguien de su fe y probidad en testimonio de lo que afirma.
( probidad: honradez: Rectitud de ánimo, integridad en el obrar. )

demagogia. (Del gr. δημαγωγία).

1. f. Práctica política consistente en ganarse con halagos el favor popular.

2. f. Degeneración de la democracia, consistente en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder.


crédito. (Del lat. credĭtum).

Opinión que goza alguien de que cumplirá puntualmente los compromisos que contraiga.



La Palabra es ese camino que utilizas para entenderte con los demás, pero también, y entre otros, va más allá a tu intención de hacer aquello a lo que te comprometes, cuando la nombras, más allá de la demagogia.

Cuando a tu amigo, a tu vecino, a tu cliente, a tu familiar, a quién se la pronuncies, a ese le debes tu intención de cumplir.

Es en la intención donde radica tu Palabra en que vas a hacer, a pesar de los inconvenientes, a pesar de otros pesares.

Todo el mundo entiende que a veces no puede cumplirse por "males mayores", pero no: por tu nueva palabra dada a otro, por tu impulsividad, por tu variabilidad de pensamiento, porque tus nuevas tecnologías crees que la sustituyen, por tu justificación a engañar con el único fin de tu beneficio.

Porque si tu Palabra sólo es demagogia, tu crédito se vera reducido hasta ese lugar donde nada importa, tu valor caerá en picado, y dejarán de confiar aquellos que te atienden y se encuentran cerca de ti.

Dar pocas veces la Palabra pero intentar cumplir con ella es signo de respeto y admiración de aquellos que te rodean, sean y vengan de donde vengan, amigos, familiares, conocidos, adversarios o enemigos.

Porque pocas cosas lleva consigo el ser humano y esta, Tu Palabra, te acompañará allá donde vayas y con quien te encuentres.

sábado, enero 05, 2008

en plenas compras, ¡ te he pillado...!



Así por sorpresa, en las rebajas o en unas compras de navidad, de las que no te puedes pasar, si son natural a tu especie...a tu especie de occidente...pero el mundo camina más allá que tu tarjeta de crédito, más allá de tu espíritu navideño, más allá de la compra de y de abertura de regalos...
Me supongo que debería ir sin más de la conciencia de tu entorno y de tu alrededor, como no de tu planeta. De algún sitio vendrán los regalos, alguien los producirá, muchas manos trabajando. Como eres un hombre estudioso, sabes que tienen su materia prima, a veces está escasea, tu voracidad la hace escasear.
Son muchos que esto del cambio climático o el calentamiento global lo consideran una inocentada de cierta clase intelectual, que a ellos no se la dan...
Pero centrado en tu egoísmo y egocentrismo, no te das cuenta que el mundo se transforma y experimenta unos cambios demasiado rápidos para la supervivencia de la Especie Humana para ir empezando, continuando conllevará la extinción de muchas otras.
Pero no hay problema, porque la bomba atómica no será la que te mate, será tu ignorancia.
La vida en el planeta me da que continuará, a pesar de ti, y de tu especie. Los artrópodos nos superan en evolución, ¿o es que te crees más evolucionado porque pises tu a una hormiguita ...?
¿ Qué puedo hacer ? tu mismo deberás darle respuesta, al menos eso es hacer algo, lo mínimo, algo de "respuesta-práctica".
Aquello que la naturaleza nos deja a través de su materia o su observación, ese es un buen regalo que debemos valorar, para que perdure también, por encima de ti, por encima de tu egocentrismo.
Si crees en Dios, debes respetar lo que creo. Y si no, debes respetar donde habitas y te mueves.
Es la forma de mantener la belleza de la Naturaleza.