viernes, agosto 31, 2007

Atrapando un Sueño...


El niño se acercó corriendo y apresuradamente a su padre y le comentó: "Papá quiero ver el Mar".

Su padre le dijo: " Para ver el Mar debes viajar un largo camino..."

El niño, que era muy valiente, enseguida replicó: "Iré, no me importa", y se envalentono tanto, que se puso a hacer las "maletas", bueno es un decir, pues sólo llevaba consigo otros pantalones y una camiseta enrollados en un palo, ¡ ah ! y un bocata, nada más, pues para hacer un largo viaje no hay mejor que viajar ligero.

Por el camino se encontró un burrito, y ese burrito parecía que sólo sabia rebuznar, pero no era así, era un conocedor de los caminos más angostos y rápidos de la geografía, y muchas cosas más.

Juntos caminaban, andando ambos, ya que como todos sabemos el burrito no quiere cargar a sus espaldas a nadie, sea pobre o rico, gordo o delgado...como suele decir: " ya cargo con los pesares de los demás..."

Caminaron un largo trecho, y una mañana allá, a lo lejos, divisaron lo que mucha gente en periodos de vacaciones no puede dejar de ver y sentir, que no es más que el Mar, la inmensidad del Mar.

Ambos echaron a correr, pero en el encuentro, se tropezaron con una enorme concha, que parecía una roca situada junto al mar.

Como eran respetuosos, después de los dolores, observaron a esa concha, que abierta les miro y les dijo que era una almeja.

Entablaron una charla amistosa.

Entonces...

El mar fue en su busca, y todos rieron y bailaron con el vaivén del mar.

Después se despidieron, y emprendieron su regreso a su hogar, que sabemos que era un poco largo, aunque menos que antes, pues volvían más contentos y más sabios que antes, porque como les contó la almeja: " Las olas del mar son los sueños incumplidos de todos los seres vivos, que van a parar allí ", y que "todos queremos adentrarnos en ese vaivén de olas en el mar para recuperar algunos de los sueños que se nos han marchado, y allí se encuentran" ," A veces, uno atrapa los sueños de otro, que también son bellos y diferentes, y los toma como suyos ".

Así volvieron los dos, el burrito y el niño, contentos, alegres y soñadores, y colorín colorado ese sueño ha empezado...